Un concepto distinto y con un ambiente campirano fuera de la ciudad es este restaurante donde además de comer deliciosos platillos regionales y café caliente podrás convivir y hasta alimentar a los animales que ahí tienen, desde caballos, burros, conejos hasta diversos tipos de aves y por supuesto los coquetos pavorreales que te reciben al llegar a este lugar ubicado al girar a la derecha en la vías del tren por la carretera que conduce al Golfo de Santa Clara.